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RESTAURANTE ESLAVA, SEVILLA.

UNA JOYA EN EL CORAZON DE SEVILLA

PRECIO MEDIO 25-35 €
CALIDAD-PRECIO 😋😋😋😋
UBICACION Calle Eslava, 3.
CONTACTO 965 260705
WEB www.espacioeslava.com

 

Cuando le das a un taxista la calle y el barrio a los que vas y te dice directamente “¿qué, a cenar al Eslava, no?”, entonces te das cuenta de que has acertado en la elección antes siquiera de probar bocado. Cuando llegamos a la vía que da nombre al restaurante, en el barrio de San Lorenzo, a eso de las ocho de la tarde, pensábamos que no tendríamos problemas para cenar, pero tuvimos que poner nuestros nombres en una lista y esperar, con un buen vino blanco, a que nos llamaran. Así que entramos al local, demasiado pequeño para la cantidad de gente que allí puede concurrir, pero con el alma necesaria para atraparte desde el primer momento.

Lo que más valoramos desde el  inicio, a pesar de la espera, fue el excelente servicio, algo que se fue confirmando conforme avanzaba la noche. Todas las personas que nos atendieron fueron enormemente profesionales, con un trato agradable y educado, dando sugerencias cuando se les preguntaba, y atentos a las necesidades de todos los clientes, incluidas las dudas y traducciones necesarias para que los comensales extranjeros entendieran  la carta.

Y he aquí lo verdaderamente importante: la carta. Muy variada, con materia prima de una calidad incuestionable y accesible a todos los bolsillos. Lo cierto es que no pudimos pedir todo lo que nos apetecía. Habría sido una temeridad. En primer lugar nos llamó la atención “un cigarro para Bécquer”, que resultó ser todo un clásico y uno de los grandes éxitos del lugar. Es un plato hecho con pasta brick, sepia y algas. Nos encantó. Decía el poeta sevillano: “El que tiene imaginación, con qué facilidad saca de la nada un mundo”.  Supongo que eso es lo que debe aplicar el cocinero del Eslava en su trabajo. Lo digo por el segundo plato que pedimos: “Yema sobre bizcocho de boletus y vino caramelizado”. Exquisito, delicado, fino en la boca… y también premiado.

Tampoco nos equivocamos en nuestra tercera elección: Alcachofas con ajito frito y virutas de bacalao. Quizás echamos de menos un poco más de merluza, pero de la calidad del plato dio buena cuenta la limpieza del mismo cuando terminamos. Finalmente, nos decidimos por el “solomillo con salsa de Cabrales”. Sin duda menos original que los anteriores, pero las dudas, fue una recomendación del camarero, desaparecieron cuando mojamos la salsa: inmejorable. Y la carne, muy tierna, en su punto.

¿Quién puede pedir más? Pues nosotros lo hicimos, y acabamos el festín con dos medios postres (otro de los aspectos que se deben agradecer al Eslava): tarta de chocolate con esencia de naranja, excelente e incluso ligera, diría yo, y helado de queso viejo con dulce de membrillo, también más liviano de lo que uno podría pensar y muy sabroso.

Todo ello perfectamente maridado con una de las recomendaciones del personal y con un precio final que rondó los 25 euros por cabeza. En definitiva, una velada inolvidable que nos llevará de nuevo al Eslava la próxima vez que visitemos la ciudad hispalense.

AUTOR: MAGA

CANCION: AGOSTO ESQUIMAL

No es verdad que no quiero querer más
guardo el mar en un bote de aguarrás
cúrame con tus dedos
llévame a tu lado
a mi lado
ya no estás
ya no estás
ya no